Me detuve en medio de esa plaza con mi amiga para descansar un rato. Hacía tanto tiempo no nos veíamos, habían cambiado tantas cosas desde ese último encuentro, tantas cosas para hablar y no saber como decir esas primeras palabras. Fijé mi mirada en una pareja que pasaba por el otro lado, tomados de la mano y sonriendo como si el mundo no fuera con ellos; sentados en un banco había otra pareja abrazada. Mi acompañante me hizo mirarla a ella con ojos inquisidores: "hay momentos en los que odias ver a personas felices y te preguntas cuando llegará ese momento para tí".
No entendió esas palabras pues se suponía que la última vez que me vio yo estaba así de feliz. Es una frase muy conocida pero no por eso menos cierta "no te das cuenta de lo que tienes hasta que lo pierdes". Cuando estamos solteros queremos las ataduras de una relación, cuando tenemos pareja ansiamos la libertad de la soltería. ¿Quién nos entiende? Si ni nosotros mismos nos entendemos muchas veces cómo va a entendernos otra persona.
"Hay una razón por la que dije que sería feliz sola: no fue porque creyera que sería feliz sola sino porque creía que si amaba a alguien y salía mal no lo superaría. Es más fácil estar sólo porque, ¿y si te das cuenta que necesitas amor y no lo tienes? ¿Y si te gusta y dependes de él? ¿Y si construyes tu vida entorno a él y luego todo se desmorona? ¿Se puede sobrevivir a ese dolor? Perder el amor es como sufrir daños en un órgano, es como morir. La única diferencia es que la muerte acaba, esto puede continuar para siempre."
No entendió esas palabras pues se suponía que la última vez que me vio yo estaba así de feliz. Es una frase muy conocida pero no por eso menos cierta "no te das cuenta de lo que tienes hasta que lo pierdes". Cuando estamos solteros queremos las ataduras de una relación, cuando tenemos pareja ansiamos la libertad de la soltería. ¿Quién nos entiende? Si ni nosotros mismos nos entendemos muchas veces cómo va a entendernos otra persona.
"Hay una razón por la que dije que sería feliz sola: no fue porque creyera que sería feliz sola sino porque creía que si amaba a alguien y salía mal no lo superaría. Es más fácil estar sólo porque, ¿y si te das cuenta que necesitas amor y no lo tienes? ¿Y si te gusta y dependes de él? ¿Y si construyes tu vida entorno a él y luego todo se desmorona? ¿Se puede sobrevivir a ese dolor? Perder el amor es como sufrir daños en un órgano, es como morir. La única diferencia es que la muerte acaba, esto puede continuar para siempre."
Me encanta, Andrea, esta entrada es genial! El realismo con el que lo describes es brutal, triste pero muy bonito. Sigue escribiendo, por favor.
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