buscar o no buscar...

La felicidad es una recompensa que le llega a quien no la busca. Cuando menos buscamos es cuando encontramos. ¿No te ha pasado lo de buscar algo y no encontrarlo y cuando dejas de buscar lo encuentras? Durante tiempo busqué la felicidad sin ver que nunca se había ido de mi lado, era yo que no entendía que cada momento puede ser feliz.

Por mirar al pasado no era capaz de ver qué tenía enfrente, un presente y un futuro me esperaban con los brazos abiertos con todo lo que anhelé durante tiempo. Cuando tienes una mascota, tienes un amigo. Cuando encuentras un amigo, encuentras un tesoro. Cuando tienes un tesoro, no hay malos momentos. Y una de las alegrías de la amistad es saber en quien confiar. Me dije que soñaba con encontrar a alguien y me esforcé a pensar que me podrían quitar el sueño pero no las ganas de seguir soñando. ¿Qué pasa si creo en el destino? ¿Qué pasa si creo en la esperanza?

Hay una regla simple: el que te quiere te busca. Debemos aprender a dar la misma importancia a las personas que ellas nos dan a nosotras y sobretodo no perder por error a quien nos ama porque amamos por error a alguien. Pero no sólo quien te quiere te busca, también te espera a que seas capaz de decir las palabras que debes decir, a que puedas hacer lo que debes hacer... Cuando menos lo buscas lo encuentras, eso siempre lo he sabido y últimamente se ha convertido en una creencia.